Los champiñones son un alimento dudoso para mucha gente. Después de todo, son hongos, y nadie realmente quiere pensar que están comiendo hongos voluntariamente. Sin embargo, a lo largo de los años, muchos se han interesado cada vez más en cocinar y consumir hongos. Son un alimento bajo en calorías que funciona muy bien en muchos platos vegetarianos y étnicos, ayudando a agregar textura y sabor sin aumentar de peso.
Si todavía dudas sobre probarlos, podría ser porque tienes miedo de enfermarte. Después de todo, están asociados con las propiedades psicodélicas y venenosas de algunos tipos específicos. Puedes pensar que si tus hongos se deterioran, vas a hacer un mal viaje.
La verdad es que los hongos malos pueden enfermarte mucho. Sin embargo, el riesgo es muy bajo si come en tiendas o en una granja. Incluso hay menos riesgo si los comes cocidos. Aún así, obviamente no quieres comer comida mala. No quieres arriesgarte.
Esto es lo que debe buscar cuando un hongo está girando y cómo almacenarlo adecuadamente para evitar su deterioro.
¿Se han vuelto malos?
La respuesta es sí, si:
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| Huelen mal / gracioso | Están arrugadas | Están creciendo manchas oscuras |
| Son viscosos | Son mayores de dos semanas. | Se están volviendo más oscuros |
- Son viscosos. La regla general número uno cuando se trata de detectar la frescura es que cuando los hongos son viscosos, ya no son buenos para comer. Esto podría deberse a estar sentado en la nevera durante demasiado tiempo. Si bien no son definitivamente peligrosos en este punto, todavía es una buena práctica común de cocina arrojarlos.
- Tienen arrugas A veces, los hongos no se vuelven viscosos, pero se secan y se arrugan. Si bien está bien secar un poco los hongos (ya que de todos modos son vegetales bastante húmedos), no querrás que tus hongos se arruguen demasiado . Entonces, si se ven arrugadas, es una apuesta más segura lanzar en lugar de consumir.
- Son más oscuros o tienen manchas oscuras. Las manchas oscuras son una señal de que están empezando a ir mal. Lo mejor que puedes hacer es vigilar tus hongos durante todo el tiempo que estén en el refrigerador. Si ve que se oscurecen o desarrollan puntos oscuros, es hora de usarlos o perderlos.
- Han estado alrededor por dos semanas o más. El consenso general en términos de vida útil / tiempo de almacenamiento con hongos es de alrededor de dos semanas en el refrigerador. Por supuesto, use su mejor juicio y sentido común. Si se ven, huelen y se sienten bien, probablemente todavía sean seguros para comer.
- Emiten un olor. Sus hongos no deben tener un olor notable o fuerte. Si puedes olerlos, se han echado a perder. Por supuesto, si estás metiendo la nariz en ellos, obtendrás un aroma, pero debe ser ligero y sutil. Si levanta la bolsa, la abre y tiene que girar la cabeza, entonces tiene hongos malos.
Técnicas de almacenamiento adecuadas
- Déjalos respirar. Almacene los hongos de manera que les permita un poco de aire sin resecarlos demasiado. Una bolsa de papel dentro del refrigerador es una forma común.
- Bolsas de plástico y toallas de papel. Otra forma de mantener los hongos relativamente frescos es almacenarlos en bolsas de plástico forradas con toallas de papel para capturar la humedad. Asegúrese de cambiar las toallas regularmente si no las está usando de inmediato. ¡Encuentra diferentes maneras de cocinarlos para que los uses en tus comidas antes de que se deterioren!
- Manténgalos en su envoltura sellada. Una de las técnicas de almacenamiento más efectivas es simplemente mantenerlas en los contenedores / bolsas selladas en las que vienen. Asegúrese de no abrir el contenedor o manipularlas (no es necesario transferirlas) hasta que esté listo para usalos, usalos a ellos.
- Congelación. Si desea congelar algunos hongos para usarlos más adelante, esto es posible. Sin embargo, debido a que los hongos retienen tanta agua, es mucho más difícil congelarlos cuando están crudos. Si va a hacerlo, asegúrese de congelarlos en papel pergamino y luego transferirlos rápidamente a una bolsa hermética con la mayor cantidad de aire posible. La mejor manera es primero cocinar, ya sea blanquear, saltear o cocinar al vapor los hongos y luego empacarlos en recipientes herméticos o en bolsas para congelar, lo que tenga menos aire.
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